To Life

Noches mis lectores, desde la habitación beige, con altas temperaturas en este invierno les escribo novedades. 
Ayer no pude escribir lo que paso el sábado, tenía demasiada adrenalina, era demasiada, demasiada, no podía dormir por lo mismo. Como explicarlo, no sentía esas mariposas como dicen por allí, me sentía cómoda después de la ansiedad que tenía al principio.

El lugar a donde fuimos, era tranquilo, no podía dejar de tocar su mano, de verlo, sentía como si fuera a romperse todo, no podía detenerme, quería congelar el tiempo y estar mirando su rostro largo y tendido. Fue maravilloso, los temas que conversamos, sin salir de pleito ni nada, fue bastante interesante, nos abrazamos constantemente, nos acariciamos constantemente, sus demostraciones de afecto son un delirio para mí, no sabía como reaccionar, todo se volvió turbulento dentro mío, tan real y tangible, pero parecía un sueño del que no quería despertar. Nos dimos nuestro primer beso, fue en principio bastante vergüenza, porque no me imagine que lo fuese hacer y me aleje, pero después con mis manos acerque su rostro y lo besé. ¡Oh Dios Mio! Fue algo hermoso, aun con mi torpeza y mi abejita con la suya. Es tan intenso, le quiero demasiado, no quería separarme de él ni cuando nos despedimos en la puerta de mi casa.

Con todo esto, mi madre me dijo, yo no lo acepto, es tu decisión, haz lo que quieras.

Comentarios

Entradas más populares de este blog

The rose

Shot in the dark

Dance of the Druids